Venía con la intención de hacer/practicar fotografía nocturna... Estrellas, luna, cielo oscuro, mar oscuro. La primera noche se bubló tanto que no apareció una sola estrella. Las nubes negras amenazaban con soltar una tormenta sobre mí. Me senté a disfrutar de la furia de la naturaleza. Pensándolo bien, nunca había estado acampando solo en la playa a punto de desatarse una tormenta. Fue un regalo.
martes, 13 de julio de 2010
Uno
Que rápido llega uno a su destino cuando no hay obstáculos mentales que nos lo impidan. En cambio, cuando estamos esperando algo en concreto de la vida, aún a sabiendas de que no es seguro, los caminos se hacen largos y tortuosos.
La espera de algo incierto nos hace difíciles los caminos que recorremos. El ir a un lugar sin saber realmente lo que pasará cuando lleguemos, nos facilita el rumbo.
En ocasiones uno sólo debe buscar un destino; en ese lugar la vida tendrá preparado algo para nosotros.
La espera de algo incierto nos hace difíciles los caminos que recorremos. El ir a un lugar sin saber realmente lo que pasará cuando lleguemos, nos facilita el rumbo.
En ocasiones uno sólo debe buscar un destino; en ese lugar la vida tendrá preparado algo para nosotros.
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